En la misma, el magistrado resolvió condenar a (2) dos años de prisión de cumplimiento efectivo al acusado por encontrarlo penalmente responsable de los delitos que le imputo el Ministerio Publico Fiscal.
Durante la audiencia de lectura, el magistrado se expreso sobre la modalidad “en banda”, indicando que “el fenómeno de las pandillas se ha instalado definitivamente en Argentina, cuyo origen podríamos encontrarlo en la descomposición familiar, entre uno de cuyos factores se encuentra la exclusión social”.
En este sentido, agrego que “las pandillas existen porque ofrecen un sentido de pertenencia y de identidad que permite el afecto y se forma una hermandad que sustituye a la familia.
Finalmente, en este contexto, el Dr. Casal manifestó que “este fenómeno de las pandillas lo estamos viendo repetidamente en esta jurisdicción y debe servir de alerta para que las autoridades tomen debida nota y conciencia que la solución a esta problemática no pasa por los órganos que habitualmente emplea la sociedad para combatir la delincuencia tradicional, sino en la búsqueda de su razón de ser, buscando para los jóvenes los medios adecuados para su integración y para la sociedad la tan ansiada y reclamada seguridad”.
Cabe recordar, que en esta causa, ya se realizo un juicio por el que fueron acusados seis jóvenes mayores de 18 años, y dos menores de 16, a raíz de los hechos ocurridos el 8 de septiembre del 2008, en el local comercial “La Nueva Colonia”
Los resultados del mismo fueron la absolución de culpa y cargo, para Jairo Jaime Notao (20) al considerar que no se encontraban debidamente acreditada, la participación de joven en los hechos investigados, por lo que se encontraba favorecido por el beneficio de la duda
Asimismo, cinco imputados obtuvieron una suspensión de juicio a prueba, uno fue declarado inimputable por ser menor de 15 años y también hubo una extinción de la acción penal por fallecimiento
Los Hechos
La situación que se juzgo ocurrió el 8 de septiembre del 2008, aproximadamente a las 21:50, cuando dos jóvenes, identificados como Pablo Javier Chaile (detenido con prisión preventiva) y Gastón “Mono” Ponce (fallecido) ingresan al autoservicio “La Colonia”, de donde sustraen algunos productos.
Cuando ya están en la vereda, el propietario del local, les solicita la devolución de lo sustraído y es atacado a piedrazos por un grupo de mas de seis jóvenes, que esperaban, a sus compañeros afuera.
El comerciante, llama a la policía, los persigue en su vehículo y los detienen al llegar a la intersección de las calles Uruguay y Rivadavia.
De acuerdo a la investigación, en ese momento Pablo Chaile tira una piedra contra el patrullero y provoca la rotura de la luneta del rodado.
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