viernes, 26 de diciembre de 2008

Un verdadero desastre

Ya lo había reclamado el Concejal oficialista Alberto Mazquiaran en las últimas sesiones. Nada de eso se escucho. O tal vez si. Nadie reaccionó. Una pequeña repasada por encima sin mucho conocimiento vial hizo un maquinistas que al final terminó por desistir de su misión cuando marcha atrás “sin chicharra” y en contramano atropelló a un joven motociclista que quedó peligrosamente alojado debajo de la cuchilla.


En fin. Las calles están como están, INTRANSITABLE, pozos y baches, agua estancada en los desagües pluviales, tierra amontonada, calles cerradas y un conjunto de desechos que complementan el paisaje urbano de una localidad que espera una edición más del Festival Nacional de la Esquila.


La empresa “Malaspina” dejó en abandono la obra de red cloacal sin sanear las calles como corresponde. El impacto urbano es de lo más desastroso. Mucho que desear deja el desarrollo de la obra que no resuelve el “mientras tanto” improvisando y ensayando con los problemas que a diario le toca vivir.


Llegó el fin de año y todos se rajaron como balde plástico. Mientras acá nadie dice nada, total es un pueblo. Si ni el jefe máximo local tiene resuelto que va a hacer con toda la basura de la vía pública que respeto le pueden tener los foráneos.

Pase y vea, las instantáneas invitan a sortear algunas dificultades para trasladarse de un lugar a otro de la localidad.