Hace aproximadamente dos meses el servicio de internet que brinda la Cooperativa de Servicios Públicos local es pésimo. Tal como lo pudimos constatar para actualizar este medio, el ciber establecido en la dependencia de la cooperativa funciona con 4 maquinas de las 12.
Esto se debe a la ausencia en el mantenimiento de los equipos desde que se hiciera cargo la nueva administración que preside Enrique Reggiani.
No sólo esto pasa, sufrimos en carne propia la espera de que el usuario desocupe un equipo para así poder acceder al servicio. Servicio que a la hora de abonar -en tiempos de tecnologías innovadoras – se cobra al mejor ojo del operador/a de turno.
Hasta hace un tiempo el arancel era estipulado por un sistema de cobro. Hoy con cara de vergüenza el empleado – lista en mano – se hace cargo de hacer frente a la recaudación de 4 míseras máquinas.
Otra gran falencia que es observada por los propios empleados y usuarios se da a la hora de los reclamos, se debe llamar a los referentes a sus propios domicilios, ya que desde que asumieron la responsabilidad de dirigir los destinos de la cooperativa rara vez asisten a la institución y que están en pleno conocimiento de las necesidades.
Postergaciones como estas nos llevan a pensar cual es el propósito de desarrollo que se fija una institución como esta. Debemos sumirnos en un estado de constante actitud pueblerina?.
Ilustran más que las palabras estas instantáneas. Volveremos al chasqui?.
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