El foco ígneo se produjo en un precario galpón construido detrás de la vivienda y el rápido accionar de los Bomberos Voluntarios impidió que se propagara hacia la casa.
Según relataba la propietaria Aurora Rumay el incendio habría sido producto de una intencionalidad de alguna persona; luego termino transformándose en una enorme llama que podía observarse desde otros puntos de la localidad.
La dueña de casa también narró que momentos previos a dar aviso a los Bomberos trato de apagar el foco ígneo pero al llegar a la canilla se encontró con que el servicio de agua potable estaba cortado y por esa circunstancia debió dejar que se continuara quemando el galpón hasta que pudieran sofocarlo.
Idéntica incidente corrieron los servidores públicos, ya que a escasos veinte metros se encuentra el hidrante, el que fue imposible utilizar por la falta del flujo. Debieron hacerlo con la autobomba.
Numerosos vecinos se dieron cita en primera instancia para ayudar a extraer interior de la morada mueble, electrodoméstico y otras pertenencias que pudieran salvar antes de un eventual incendio de la vivienda. Mientras que otros meros observadores veían el accionar de los bomberos y familiares tratando de controlar las llamas que amenazaban con quemar el inmueble.
Gracias a esta intervención casi inmediata no hubo que lamentar grandes daños materiales. Con las primeras luces del día los Bomberos Voluntarios realizaran los peritajes de rigor a fin de establecer el origen del incendio.
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