sábado, 12 de septiembre de 2009

Festejo educativo con baile y mucha alegría.

La víspera al Día del Maestro encontró a los docentes y auxiliares festejando en el Café de Ramón.

La fiesta tuvo una convocatoria conto con más de medio centenar de educadores de las escuelas 72, 706, 36, 148, 419 y 2413, respectivamente.
Los maestros y auxiliares de nuestra localidad festejaron, el ultimo jueves hasta las primeras horas del día viernes, aprovechando el feriado que precedía la jornada.
Hubo fiesta y baile, algunos demostraron sus dotes de cantante interpretando una variada grilla de música. La fiesta que se realiza cada año, esta vez conto con una gran adhesión.

La eterna vocación de enseñar sobre la vida y el conocimiento
Se conmemoró en todo el país el Día del Maestro, ese personaje que es recordado como “el que me enseñó a sumar y restar”, entre tantas cosas que tienen que ver con el estudio y la vida. La fecha fue instaurada porque un día como el 11 de septiembre de 1888, fallece Domingo Faustino Sarmiento, quien trabajó notablemente en favor de la educación pública.

Algunos historiadores y especialistas en educación, señalan como hito de creación del sistema educativo el día 8 de junio, cuando el Congreso de la Nación sanciona la Ley N 1420. El profesor Gregorio Weinberg -prestigioso historiador especialista en educación- , sostiene: “esta ley orgánica tuvo como influencia decisiva la formación de varias generaciones de argentinos; sus sabias y generosas previsiones han facilitado el mejoramiento del nivel cultural del país…” (Weinberg 1984, p. XVI). Y como tal, ha sido el correlato de fuertes enfrenta-mientos entre sectores de la sociedad argentina de finales del siglo XIX.

Esta ley afirma en uno de sus párrafos que la educación deber ser obligatoria, gratuita, gradual y laica.

Debido a esta situación, en las distintas provincias del país se comenzaron a abrir varias escuelas: resultaba necesario transformar la ley en una realidad.

El territorio patagónico se presenta inhóspito, insondable y agreste. Pese a ello muchos maestros asumieron el desafío y se aventuraron a transitar estas tierras para sentar la bandera de la educación argentina. Nada fue sencillo para los primeros educadores de estas tierras. Cada paso significó.

Una historia para rescatar
Inicios de la Escuela Nº 1

Emilia Sanz de Portela nació en Argentina, en Comodoro Rivadavia, pero junto a su familia se traslada a España. Allí hizo la escuela primaria, y una vez terminada, ya en Argentina, accedió a una beca para realizar los estudios de maestras en el Colegio Guido Spano, ubicado en Buenos Aires.Los primeros años en la docencia los comenzó a desarrollar en Comodoro Rivadavia con una suplencia. Luego la designaron titular en Río Mayo, una escuela muy pequeña de Chubut. En esta provincia conoce a su marido y deciden ir a vivir a Tierra del Fuego, allí también se desempeñó como docente.

Unos años después de vivir en Ushuaia deciden venir a Río Gallegos, “fue en el año 55” recuerda Emilia, “allí trabajé durante dos años y medio”.En esos años en la ciudad, tras el aumento de la matrícula estudiantil, el Ministerio de Educación de la Provincia decide crear una nueva escuela, la Nº 1. Junto a ésta también se crea el primer jardín de infantes de la ciudad. La primera sede de la Escuela Nº 1 fue donde hoy se encuentra el Conservatorio Provincial de Música.

Emilia recuerda que “todo en esa escuela fue hecho por el trabajo de los padres y miembros de la comunidad educativa”.En los primeros años de la Escuela Provincial Nº 1 –actual Escuela Nº 1º- se recibían todos los alumnos nuevos y, con ellos, sorpresas de distintos orden.

1 comentario:

Anónimo dijo...

LAAAAA??? SI LOS DOCENTES EMPLEARIAN ESTE REGIMEN DE PUNTUALIDAD Y RESPONSABILIDAD PARA LLEGAR A SUS AULAS NO ESTARIAMOS ABLANDO DE LA FALTA DE ENCEÑANZA Y EDUCACION,ACA SI!!! QUE PUNTUALIDAD Y COMPROMISO PARA LLEGAR TEMPRANO??? CHEEEE?? O SERA QUE LOS DOCENTES,NO LES ALCANSA PARA "PARAR LA HOLLA",MMMMM.-