¿A qué estamos jugando?

Se aproximan nuevos tiempos y como era de esperarse poco a poco comienzan a asomar la cabeza los laderos de un lado y del otro y de mas allá también.

Nuevos actores políticos con papeles secundarios y comentaristas u analistas políticos que mezclan principios doctrinarios de la ultra derecha con el arte culinario al mejor estilo gato dumas.

Y siempre en un rincón están los que observan impertérritos como el agua que va y viene intenta borrar las huellas de los que tienen mucho camino andado, pero que nunca han llegado a ningún lado, ni siquiera con sus intenciones.

Pero los tiempos de la globalización hace que las barreras desaparezcan y los límites, mejor no recalcarlo, hasta en el plano ideológico.

Algunos partidos ya comenzaron tirándose a la pileta, con salvavidas de plomo y todo. Si están pensando bien ese que lo tenían que aguantar hasta el 2011 aunque no les gustara su cara. Ese, ahora, es consejero de un partido. Una especie de gurú de medio pelo.

La pregunta que yo me hago y usted seguro también es: ¿Quiénes son los candidatos? ¿Quiénes son los asesores detrás de estos candidatos?¿Qué estrategias políticas pensaran practicar con nosotros y a pesar de vosotros?

Hay para todos los gustos, de todas las edades, estados civiles, colores, y credos.

Dónde será que la rueda de la fortuna hará un párate.

Como siempre el panorama político resulta un poco turbio, por la aparición de terceros interesados que no es lo mismo que decir comprometidos.

Hablamos de esos que opinan, pero que nunca se comprometen.

También se suman, a este chimichurri electoral, los candidatos inflados esos que se van desinflando hasta quedar chiquitos; en el universo de los votos.

Será que habrá quienes entiendan de que se trata este juego, no obstante, están los aficionados y los que juegan por primera vez.

Algunos intentan por lo bajo un “boca de urna” a cinco meses de las elecciones.

Otros no llevan maquina de tiro y se aprestan a enganchar su vagón en cualquier fila de trenes que pase.

Lo bueno es que cada vez parece ponerse un poco más dura la calle para los futuros funcionarios, hoy precandidatos de los partidos. La burguesía hace un importante aporte y no son pocos los comerciantes que esperan, superar, la prueba de confiabilidad que el electorado impone.

Todo o nada la suerte esta echada y aunque todavía faltan nombres y precandidaturas por conocerse, todo parece indicar que sobra gente.

Lo que falta son ideas, proyectos, debates serios y con altura, conceptos claros, militancia social y un recambio de jugadores tampoco estaría mal.

Pero la verdad es que la política es una actividad que afecta a todos, por eso no se debe descuidar.

Todos hacen política de un modo u otro. Pensemos por un momento, entonces, que aporte podremos hacer nosotros.

Como siempre, creí, lo principal es comulgar y transmitir buenos principios.

Ni siquiera las internas son, un desafío, para los riomayenses. Justamente es aquí donde cada uno internamente sabe como empiezan y culminan algunas cosas.

Sin la política cualquier intento de ser parte de la solución, sería, sólo un sueño. El problema es si por no abrir bien los ojos, nos quedásemos dormidos, antes de llegar a buen puerto.

Escrito por: EL TROYANO.